Resumen:
Este libro aborda los manuscritos de Manuel Puig como retos arqueológicos de una escritura capaz de mostrar sus heridas, sus marcas de exilio. El escritor nómade que siempre volvía a Buenos Aires ve interrumpido su diálogo con el lector: un teléfono que suena para proferir una amenaza hace eco con otros que no responden. Esto sucede en 1974 y la primera respuesta de Puig es una novela dialogada que comienza con una emblemática frase: "A ella se le ve que algo raro tiene". Refugiado en México, nuestro escritor se prodiga en guiones cinematográficos y comedias musicales, pero en 1979 surge otra de sus novelas raras, aquella que la crítica se empeñó en leer como la de una mujer internada que tiene suecos. Los manuscritos no sólo muestran lo evidente, que es la primera novela argentina en la que aparece una Madre de Plaza de Mayo, sino que ayudan a ver hasta qué punto "Pubis angelical" propone un nuevo régimen de representación en el que el realismo es una cuestión de géneros que acá se resuelve por el lado de la alta costura.