La batata es una hortaliza de fácil cultivo, siendo la variedad Gem, de sabor dulce y pulpa anaranjada, un rubro importante de ingresos en la economía de medianos y pequeños productores familiares en Gualeguaychú. Este cultivar, de tipo húmedo, se ve afectado por hongos fitopatógenos presentes en el suelo, causantes de pérdidas de rendimiento y mermas en el almacenamiento. Por esa causa, de forma preventiva y sistemática, se utilizan fungicidas químicos autorizados por Senasa. A partir de una ordenanza municipal, que restringe la utilización y aplicación de agroquímicos en el ejido, se provoca la transición hacia un sistema de producción que prescinda de estos insumos o los sustituya por otros amigables con el ambiente. Este nuevo enfoque permitiría la producción de alimentos inocuos para el mercado de cercanía, cuidando el medio ambiente y la salud de los consumidores, de los productores y sus familias. En este contexto, y en pos de proponer una alternativa ecológica de fácil adopción por los horticultores, se explora la factibilidad del uso potencial de los microorganismos Trichoderma spp. y Bacillus subtilis como biofungicidas en el cultivo de batata comercial.
Sweet potato is an easy-to-grow vegetable, and the Gem variety, with its sweet flavor and orange flesh, is an important source of income for small and medium-sized family farmers in Gualeguaychú. This humid cultivar is affected by phytopathogenic fungi present in the soil, which cause yield losses and storage losses. For this reason, chemical fungicides authorized by Senasa are used preventively and systematically. A municipal ordinance restricting the use and application of agrochemicals in the ejido has led to the transition to a production system that dispenses with these inputs or replaces them with other environmentally friendly ones. This new approach would allow the production of safe food for the local market, while protecting the environment and the health of consumers, producers and their families. In this context, and in order to propose an ecological alternative easily adopted by horticulturists, the feasibility of the potential use of the microorganisms Trichoderma spp. and Bacillus subtilis as biofungicides in the commercial sweet potato crop is explored.