Resumen:
En el primer ciclo de la obra en prosa de Joaquín V. González, la influencia de los grandes creadores románticos, se manifiesta ya con espléndido brío y telúrica grandeza. La concepción del mundo propia del romanticismo europeo encuentra terreno fértil en el espíritu del escritor riojano para darse allí con profusión de rasgos característicos y al mismo tiempo impregnados de su vigorosa personalidad. El primer ciclo de esa producción abarcó, como se sabe, " La tradición nacional" (1888), "Mis montañas" (.1893)," Cuentos . . . " (1894) e "Historias" (1900).