Resumen:
El amor, esa difícil aventura que tantas veces termina en tedio, es el tema de la obra de Michelángelo Antonioni. Pero también lo es de casi todo el arte, especialmente del contemporáneo. Entonces, es preciso preguntarse dónde radica la originalidad de esta temática, cuáles son las posibilidades y limitaciones de sus intentos descriptivos, a qué refiere la singularidad de un hecho artístico de implicancias testimoniales que en los últimos años ha despertado atención y polémica, rechazo y adhesión. Desde un principio, surge con evidencia que la idea que del amor tiene Antonioni refiere a una dimensión problemática donde nada es seguro y todo resulta cuestionable y cuestionado, y donde está en juego la realización personal de cada individuo, su desamparo, su egoísmo y, sobre todo, las dificultades que encuentra para la comunicación, la soledad, aun la frustración, que muchas veces aparece como destino ineludible.