Resumen:
Oteiza no es sólo el creador, el artista que ha obtenido tantos grandes premios en las Justas Internacionales. Es el pensador, es el orientador de toda una generación de artistas. El teorizador del Arte Abstracto en el País Vasco, el que ha vertebrado los distintos istmos, con sus búsquedas e investigaciones. El que ha fundado además sus teorías con el lenguaje verbal preciso y la soltura no común a quienes fían su medio de expresión a las formas plásticas. Sus ensayos, sus juicios críticos, sus libros esclarecedores, orientadores de una juventud ávida, marcan verdaderos hitos.