Resumen:
Antes de entrar a considerar lo autobiográfico en Barbieri y en Norah Lange es conveniente establecer las diferencias posibles entre lo autobiográfico y lo lírico. La revelación puesta de manifiesto en la actitud de entrega que configura lo lírico, es, sin duda, un punto estático en el tiempo y en el espacio. El poeta lírico da sus vivencias proyectadas desde un punto suyo íntimo, a veces mínimo, pero que se engrandece por la ampliación de eco que le presta la resonancia de su propio espíritu. Lo autobiográfico, en cambio, contiene relato de vida, pero ajustada al suceso, ceñida al episodio que se narra. Y el relato se aprieta con rigor a la causa que lo origina y al efecto que el suceso produce, de tal manera que, sin ser historia, es historia de la propia vida —naturalmente no deprovista de la visión personal y subjetiva— y lleva un sentido dinámico que lo diferencia claramente del sentido estático de la producción lírica.