Resumen:
La pregunta sobre lo que el hombre sea es tan vieja casi como la Filosofía. Si se limita la cuestión al reino de la naturaleza, la respuesta corre por cuenta de la Antropología, pero si se pregunta por la esencia del hombre, de su puesto en el cosmos y de su destino, entonces debe responder a ella la Antropología Filosófica, antropología de la esencia del hombre, distinta de las otras antropologías (mítica, poética, teológica, científico-natural o evolucionista). En el centro de esta Antropología Filosófica está hoy el problema del espíritu pero acerca de esta noción hay enfoques diversos que parten, ora del individuo para reparar en su conexión irrenunciable con un nosotros, ora parten de la comunidad para rematar en la individualidad de la persona, ora del reconocimiento de elementos comunes al individuo y a la sociedad que se anejan en superstructuras las cuales parecen decisivas en la concepción del Hombre.