Resumen:
En una aproximación desprejuiciada, el texto del Martín Fierro se ofrece como forma dramática que salta de los carriles de su tiempo sólo porque la trocha en que andaba lo dramático por ese entonces no le correspondía. Y ahora, como es natural, entusiasma devolverle una teatralidad no asumida por imperio de pseudo-normas aristotélicas que al recrudecer tiranizan los diversos planos de la creación estética.