Propuestas y experiencias
Mapear memorias: lxs estudiantes en el ex BIM 3
Map memories: students in the ex-BIM 3
Clio & Asociados. La historia enseñada
Universidad Nacional del Litoral, Argentina
ISSN: 2362-3063
Periodicidad: Semestral
núm. 34, 2023
Recepción: 19 Enero 2022
Aprobación: 18 Febrero 2022
Resumen: El presente trabajo se configura como una propuesta pedagógica para que distintxs estudiantes secundarios de la región conozcan y visiten el predio del ex BIM 3. La misma se enmarca en las políticas universitarias de promoción de la memoria que tienen puntualmente en este caso la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación y la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de La Plata, instituciones que funcionan en este espacio desde 2012 y 2014 respectivamente. Desde entonces se realizan diferentes iniciativas para dar a conocer la historia del lugar, entre las que se destacan las guías para ingresantes, que distan de la actual propuesta, por ello se constituye como “prueba piloto”. Se plantea una serie de recorridos por el lugar, que se desarrollan en el marco de unas jornadas, así como también se presentan diferentes actividades y materiales entre los que se destaca una hoja de ruta que sirve de guía. De esta manera, se forja un dispositivo pedagógico original y novedoso, para que las nuevas generaciones se acerquen a la historia y las memorias del BIM 3 a través de su propia experiencia como hacedores del mapeo por este sitio de memoria, a la vez que reflexionen, dialoguen, produzcan sentidos que puedan ser compartidos con otrxs.
Palabras clave: estudiantes, memorias, BIM 3.
Abstract: This article is configured as a pedagogical proposal so that different high school students from the region know and visit the site of memory of the BIM 3. It is part of the university policies for the promotion of memory that the Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación and the Facultad de Psicología of the Universidad Nacional de La Plata, institutions that have been operating in this space since 2012 and 2014, respectively. Since then, different initiatives have been carried out to publicize the history of the place, among which the guides for entrants stand out, which are far from the current proposal, which is why it is constituted as a ‘pilot test’. We propose a group of tours for this place, which take place in some conferences, as well as different activities and materials, the road map is the most important learning tool. In this way, an original and innovative pedagogical device appears, so that the new generations can approach the history and memories of BIM 3 through their own experience as mapping makers of this site of memory, while reflecting, dialoguing, producing meanings that can be shared with others.
Keywords: students, memories, BIM 3.
Mapeando las memorias del BIM 3
La Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación y la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) funcionan, desde 2012 y 2014 respectivamente, en “un predio con una historia traumática, un predio cargado de sentidos; un sitio de memoria” (Ramírez y Merbilháa, 2019: 21). Están inmersas en el barrio El Dique de la ciudad de Ensenada, junto a un helipuerto de uso oficial y sanitario emplazado en la misma propiedad. Allí estuvo establecido desde 1940 y durante 60 años el Batallón de Infantería de Marina N° 3 (BIM 3) y durante la última dictadura militar, salían la mayoría de los operativos de la Fuerza de Tareas 5 (FT5) de la Marina que controlaba la represión en Berisso y Ensenada. Gracias al testimonio de sobrevivientes y familiares de detenidxs desaparecidxs de la zona, el informe de la CONADEP confirmó que en esos años allí funcionó un Centro Clandestino de Detención Tortura y Exterminio (Abbattista et al, 2017: 2). Muchxs de lxs detenidxs-desaparecidxs del BIM 3 eran trabajadorxs de distintas empresas de la zona, como SWIFT, Propulsora Siderúrgica, IPAKO, Destilería La Plata (YPF), Petroquímica Mosconi, SIAP, Astilleros Río Santiago (ARS), entre otras, generalmente eran trasladadxs a otros centros clandestinos y algunxs “legalizadxs” pasaban a la Unidad Penal N°9. Por distintos relatos, se cree que también pudo haber funcionado una maternidad clandestina, algunos testimonios dan cuenta de que al menos Norma Raquel Raggio, una estudiante de Psicología que militaba en la Juventud Peronista y en Montoneros, pudo haber dado a luz allí a su tercer hijx. Además, desde este lugar se enviaron soldados conscriptos a la Guerra de Malvinas en 1982.
En 1999 el BIM 3 se mudó a Zárate y en el año 2000, el predio fue subastado y comprado por la multinacional CENCOSUD para la construcción de un hipermercado Jumbo, en un proyecto comercial ambicioso y de gran magnitud. Ciertamente, no se pudo detener la destrucción de los antiguos edificios que aún permanecían en pie (o lo que quedaba de ellos), no obstante, las obras fueron frenadas por una intervención del Concejo Deliberante de La Plata por el impacto ambiental que provocaría. En ese momento comenzó el camino de negociaciones, pujas y dilemas por quién tomaría el espacio o qué podría construirse: el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires propuso la construcción de dependencias policiales, el Municipio de Ensenada planeó ceder el lugar al Club Estudiantes de La Plata y la Dirección de Derechos Humanos ensenadense quería colocar un Museo de la Memoria. Finalmente, en 2006 Felipe Solá firmó un proyecto de ley para su expropiación y en 2009, la UNLP tomó posesión del terreno, aunque sin fondos para avanzar con la construcción de las dos facultades que dejarían el céntrico edificio Tres Facultades para poder seguir funcionando en un espacio más amplio y más apropiado, que respondiera a las necesidades de la comunidad educativa. Sin embargo, a los pocos años, en 2011, el gobierno nacional destinó el dinero para comenzar la construcción de los edificios, que fue acompañada por distintos proyectos encarados por docentes, no docentes, investigadorxs y estudiantes para estudiar y dar a conocer la historia del lugar.
Desde el año 2016 se realizan caminatas, conocidas como los “Talleres de memoria del ex BIM 3”, para presentar la historia del predio y sus memorias a lxs ingresantes de ambas facultades.1 Estos recorridos tienen como objetivo que ellxs puedan conocer las múltiples capas de sentidos del espacio en el que desarrollarán sus estudios, las relaciones que este tuvo y tiene con su entorno, y acercarlxs a las actividades y a los proyectos de investigación y promoción de la memoria que se llevan a cabo allí. Sin embargo, hasta el presente, estas valiosas experiencias no alcanzaron a otros sectores de la comunidad educativa, con excepción de algunas recorridas pensadas y organizadas para grupos determinados (estudiantes de posgrado, investigadorxs visitantes, entre otrxs).
Todos los sitios de memoria coinciden en que sus destinatarixs principales son las nuevas generaciones, razón por la cual portan un profundo sentido pedagógico y una misión hacia el futuro (Raggio, 2010). Sumado a esto y teniendo en cuenta que la transmisión es “un proceso denso, cargado de múltiples dimensiones, donde intervienen sujetos e instituciones que imprimen sus propias huellas, mandatos, deseos” (Dussel, 2001: 72) consideramos pertinente y valioso incorporar a nuevos actores a la construcción de memorias en el ex BIM 3.
De esta manera, arriba a la presente propuesta pedagógica que consiste en la organización y la planificación de unas jornadas que permitan a distintxs estudiantes secundarios conocer el predio donde funcionaba el Batallón de Infantería de Marina Nº3 (BIM 3), su historia y sus memorias para, a partir de allí, producir una cartografía propia del sitio para compartir con otrxs. Las Jornadas serán coordinadas fundamentalmente por el equipo de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación y de la Facultad de Psicología (ambas pertenecientes a la Universidad de La Plata) que habitualmente se ocupa de las guías. Las mismas se desarrollarán a lo largo de tres días y representarán una primera experiencia de acercamiento de la comunidad educativa platense, berissense y ensenadense a este sitio de memoria.2 El hecho de plantear las recorridas en el formato de Jornadas se fundamenta en dinámicas y prácticas organizativas de la institución, en efecto, se puede pensar que “Estudiá en Humanidades”, el conjunto de visitas de estudiantes del sexto año de la escuela a la Facultad para conocer las carreras que ésta ofrece, se constituye como un antecedente.
Debido a que las ciudades de La Plata, Berisso y Ensenada tienen una gran cantidad de escuelas secundarias provinciales de gestión pública y privada, a las que se suman los tres colegios que dependen de la UNLP, y estas Jornadas se presentan como una “prueba piloto”, se difundirá ampliamente la propuesta y los grupos de estudiantes interesadxs deberán ser anotadxs por un/a/x docente acompañante en un formulario online. Se estima que cada recorrido/taller durará entre 2 y 3 horas aproximadamente (esto permite hacer tres visitas por día), por lo cual, cuando se cubran los cupos disponibles, se armará una lista condicional que sirva, además, para coordinar posibles futuros encuentros.
El carácter de “prueba piloto” de esta propuesta se fundamenta también en su metodología. A diferencia de las experiencias que se han realizado hasta el momento en el predio, donde los recorridos guiados tienen un gran protagonismo dado que se enmarcan en las actividades obligatorias que son parte de los cursos de ingreso,3 aquí nos interesa explorar con lxs jóvenes de la escuela secundaria otros modos de transitar el espacio. Esta decisión se fundamenta, por un lado, en el encuadre escolar de la visita. En la escuela la enseñanza de la historia reciente está centrada en las explicaciones que ofrecen lxs docentes, quienes inscriben sus prácticas en una institución caracterizada por una organización jerárquica y reglamentada (Raggio, 2017). Dicho de otro modo, lxs estudiantes no toman decisiones respecto de qué desean saber y de qué manera aprender. Además, quien decide y organiza la visita es el/la/x docente. Creemos, entonces, que el sitio de memoria puede ofrecer otras formas de apropiarse del pasado reciente a las nuevas generaciones, complementarias a las de la escuela. En este sentido, la siguiente noción de mediación cultural nos parece sugerente:
Yo querría subrayar la diferencia que separa la mediación de la enseñanza (formal). Me parece en efecto fundamental ver que los museos no tienen que transformarse en lugares de enseñanza, sino quedar como lugares donde no hay obligación (...) La noción de mediación descansa sobre esta distinción esencial: yo te hago saber, dice el mediador; yo te enseño, dice el educador. Hay que dejar de lado el sistema de coacción de la enseñanza (formal) y trabajar para que se transparente el placer, el deseo. Hay una extraña libertad en un museo: no hay programa, no hay coacción... Pero esto no quiere decir que no deba estructurarse el caos (en Dujovne y Calvo, 2002: 4).
Si bien los sitios de memoria se diferencian en varios aspectos de los museos -de hecho la mayoría de sus gestorxs no elige nombrar o definir estos espacios como museos- observamos que esta conceptualización es interesante para pensar la transmisión de la memoria allí. Fundamentalmente la propuesta de pensarlos como lugares donde sean posibles recorridos más libres que creen condiciones para que lxs jóvenes pasen de la posición de "alumnxs" en la que llegan a la de "visitantes", y más aún, a la de productores de narrativas propias. Esto invita a diseñar estrategias para que ellxs tengan la oportunidad de recorrer el sitio con cierta autonomía, siguiendo sus propios tiempos y estilos de búsqueda e incluso que modifiquen las orientaciones dadas porque encuentran otros motivos de interés, nuevas preguntas que quizás lxs gestorxs del sitio no se hicieron. Al mismo tiempo, esta mirada se aleja del constructivismo “natural” que postula que el sujeto aprende solo y que las viejas generaciones no tienen nada que transmitir a las nuevas (Dussel, 2001). Para materializar estas ideas, proponemos la creación de una hoja de visita con algunas orientaciones que acompañen a lxs estudiantes en su recorrido por el predio del ex BIM 3 que permitan, en términos de Guedj, “estructurar el caos” y colaborar en la interpretación de algunas marcas. Nos interesa que primero tengan una experiencia de recorrido autónomo con esta hoja de ruta para luego, a partir de allí, generar una instancia dialógica con lxs guías y sus pares que lxs habilite, como cierre de la jornada, a producir en grupos un recorrido propio por el sitio, en el que impriman sus propias marcas e incluyan nuevas preguntas. Para ello utilizaremos algunas herramientas de mapeo, en particular, el recurso de la cartografía, ya que permite la elaboración de narraciones y representaciones propias que disputan otras instaladas y habilita el intercambio colectivo (Lafuente y Horrillo, 2017).
Por otro lado, esta propuesta se sostiene sobre la noción de “territorios de memoria” de Ludmila da Silva Catela (2014), quien subraya la naturaleza dinámica, inacabada y conflictiva de los sitios de memoria. Esta perspectiva, reconoce que más allá de que quienes están a cargo de la transmisión en los sitios construyen un mensaje que busca movilizar y eligen qué mostrar, qué contar, cómo lo contarán y quiénes serán sus portavoces, en última instancia, serán lxs jóvenes -en este caso- quienes decidirán qué hacer con lo recibido a partir sus propias experiencias, sus pensamientos y sus deseos. En resumen, esta propuesta busca reconocer a lxs jóvenes como actores que participan en las luchas que se dan en el territorio del ex BIM 3 y construyen memorias en y con el sitio.4
Asimismo, distinguimos en este proyecto otros objetivos más específicos:
Favorecer una mirada inquisidora de las marcas memoriales por parte de lxs estudiantes a partir del diseño de una hoja de ruta que lxs acompañe en su recorrido por el predio.
Fomentar instancias de intercambio dialógico entre estudiantes, docentes y guías que permitan inscribir la historia del ex BIM más allá del contexto represivo.
Invitar a lxs estudiantes a producir narrativas propias sobre el predio y su entorno a partir de la elaboración de una cartografía que les posibilite imprimir nuevas marcas, plantear preguntas y enlazar pasado y presente.
En línea con la propuesta de recorrido que ya existe en el ex BIM 3, esta propuesta pedagógica -que incluye a la hoja de ruta, el intercambio entre estudiantes, guías y docentes y la elaboración de una cartografía- propone trascender la “memoria literal” (Todorov, 2000) que solo recupera las prácticas represivas y el horror de la experiencia concentracionaria. Nos interesa que lxs jóvenes comprendan la historia del predio, tanto de su funcionamiento durante el terrorismo de Estado como las luchas posteriores que llevaron a su desafección y puesta en valor como sitio de memoria, así como las múltiples marcas que contínuan inscribiendo múltiples actores allí. Proponemos, así, una serie de preguntas en la hoja visita que inviten a establecer puentes entre pasado y presente. Siguiendo a Joan-Carles Mèlich (2006: 119), “para que pueda ejercitarse una ´pedagogía de la memoria´, es necesario introducir la categoría de lección, pero sólo hay lección si existe algún tipo de relación, de comparación, del pasado con el presente”. Los murales, en diálogo con los restos materiales que datan de décadas pasadas, invitan a hacer estos nexos, particularmente, entre las violaciones a los derechos humanos durante el terrorismo de Estado y aquellas que tienen lugar en el presente, como las desapariciones en democracia y la represión a los pueblos originarios. Pero también estas marcas habilitan el recuerdo de historias de lucha y de resistencia que perviven hasta la actualidad en otros contextos y bajo distintas formas. En este sentido, el sitio de memoria puede devenir en un aula para el aprendizaje de los derechos humanos (Raggio, 2010).
No obstante, retomando la noción de “territorios de memoria”, sabemos que el sitio, más allá de su carácter indicial, no habla por sí mismo; por un lado, porque las narrativas que “hacen hablar” a las marcas materiales son construidas por quienes lo conquistan, por el otro, porque dichas marcas son polisémicas, es decir, adquieren sentidos diversos según quien las mire. El formato de la hoja de ruta permite, entonces, hacer dialogar la narrativa que propone el sitio (pues la preguntas y las orientaciones presentes allí no son inocentes) con las narrativas que deseen construir lxs estudiantes durante sus recorridos.
Pensar la transmisión en los sitios de memoria no sólo implica definir desde qué punto(s) de vista se narra, sino también qué lugar se le asigna a lxs visitantes: si se lxs considera únicamente como receptorxs de un discurso ya pensado de antemano o como participantes de múltiples conversaciones y productores de memoria. Como sostiene Raggio, la transmisión sólo se produce cuando es requerida. No implica una mera repetición, sino un acto creativo que deja lugar a los sujetos para situarse en el presente con una proyección a futuro. En palabras de Diker (2004), la transmisión “ofrece un boleto para un viaje cuyo destino se desconoce”, porque inscribe a los sujetos en una genealogía y refuerza lazos sociales pero, a la vez, deja un espacio para que quienes reciben la herencia construyan con ella algo distinto. En consecuencia, para que la pregunta que activa la transmisión aparezca, resulta relevante considerar estrategias que favorezcan que lxs estudiantes vinculen sus propias experiencias vitales, sus intereses y preocupaciones del presente con las experiencias pasadas que se rememoran en el sitio. De ahí que la invitación a generar un mapa propio para compartir con otrxs constituye el corazón de la propuesta, porque “Un mapeo es como una fotografía, cada uno proyecta sobre el mapeo sus expectativas, ilusiones, intenciones, deseos, etc. Nunca serán dos temáticas de mapeo iguales. Y en cada una de ellas obtendríamos nuevas cosas” (Lafuente y Horrillo, 2017: 15). Para que esto suceda, proponemos una serie de preguntas abiertas, para evitar condicionar la mirada, que apuntan a estimular la imaginación, a adoptar un punto de vista, a idear diversos modos de representación y a vincular las explicaciones históricas con las emociones, la experiencia individual con la experiencia colectiva. En este sentido, recuperamos el valor intrínseco de la narración y, a través de los interrogantes, las fotografías y las instancias de intercambio, buscamos que lxs estudiantes cuenten y compartan sus impresiones y sus experiencias en el recorrido que hacen y que proponen. En términos benjaminianos, si quien viene de viaje, puede contar algo, quien emprende una visita por un sitio de memoria, también tiene algo para dar y esa narración se transforma en un lugar compartido (Benjamin, 1986). En efecto, esas narraciones serán fundamentales al momento de confeccionar el mapa, que, de múltiples maneras, también narra las sensaciones y las experiencias en torno al ex BIM 3.
2. Lxs pibxs en el BIM 3: algunas actividades a emprender
Se organizarán recorridos que duren 3 horas aproximadamente. Cada uno de ellos tendrá entre cinco y ocho grupos de estudiantes secundarios (esto dependerá de la cantidad de inscripciones que haya) y uno o dos guías del equipo de la Facultad. En cada visita, se dará la bienvenida a los grupos y se les presentará la dinámica de trabajo que consiste en una invitación a que cada curso realice su propia recorrida por el predio en compañía de su docente y orientadxs por una hoja de ruta que incluye algunas “paradas imprescindibles”.5 Para ello, se les entregará un material donde se indican los distintos puntos donde les sugerimos detenerse para observar con atención y conversar a partir de un conjunto de preguntas y textos sugeridos. Asimismo, la hoja de ruta cuenta con algunas fotografías que ayudan a ubicar las paradas pero que también pueden favorecer el diálogo entre lxs estudiantes (ver Anexo Hoja de ruta tentativa).
Si bien estas marcas son huellas del pasado, no narran en sí mismas por eso es importante pensar cómo las utilizamos, las abordamos y las interpretamos. Además, estas dan cuenta del instante (Berger, 1998), puesto que el sitio va cambiando de forma permanente y en el recorrido verán muchas otras cosas. Por ello, también se lxs invita a tomar fotografías y agregar otras paradas y preguntas, si lo consideran pertinente. Al finalizar la caminata que realicen todos los grupos de ese turno, se congregarán en el punto de partida y uno o dos guías acompañará a cada equipo a algún lugar que ellxs elijan para conversar en torno a lo observado y plantear la actividad siguiente. La idea es que cada recorrido devenga en un mapeo colectivo que ese grupo realizará en esta instancia y que será compartido en un encuentro de clausura virtual.6 Para esta actividad, se contextualizará primero qué se entiende por hacer un mapeo y se hará énfasis en que mapear es construir un relato, una narrativa sobre una temática que ya existe, y representarlo en un mapa. Se invitará a lxs estudiantes a pensar qué historia quieren contar del ex BIM 3 interviniendo, con una narrativa propia, el mapa que utilizaron para el recorrido autónomo presente en la hoja de ruta. Se guiará la actividad a partir de las preguntas que están en su poder y seguramente leyeron y algunas otras que sirvan para seguir pensando:
¿Qué “paradas” les parecen más significativas? ¿Agregarían otras? ¿Cuáles?
¿Cuáles son las ideas y sensaciones que les gustaría inscribir en cada “parada”?
¿Qué objetos, personas e imágenes les gustaría que aparezcan en el mapa?
¿Qué fotografías usarían? ¿Cuáles tomarían?
¿Qué otros datos y /o recursos creen que deberían aparecer?
¿Cómo piensan el recorrido por este mapa?
Se explicará que la idea es que con los apuntes que fueron tomando, estas preguntas y las que lxs estudiantes agregaron puedan definir y elaborar un mapeo colectivo que reúna las voces y las ideas del grupo. Indudablemente, su mapa será una forma de narrar una visita posible, contará una o varias historias de este sitio de memoria.
¿Cómo narrarían el sitio? ¿Qué elegirían contar?
¿Qué historias les gustaría contar?
¿Cómo pueden organizarlas en un mapa?
Finalmente, ¿Quiénes les gustaría que sean lxs destinatarixs de ese mapa?7
Después de dialogar y compartir brevemente estas cuestiones con todos los grupos, la guía provee todas las herramientas y los invita a escribir, dibujar, diseñar su propio mapa. La idea es que puedan terminarlo en ese encuentro y que trabajen en formato papel pero, si algún curso desea luego y en una instancia posterior (escolar o domiciliaria), trabajar en formato digital, pueden hacerlo. En principio, lo que se compartiría en el cierre virtual son las fotos de los mapas terminados.
Recursos y materiales para el mapeo:
Plano base en papel madera
Papeles de colores o post-its
Lápices y marcadores
Hilos de colores (lana o similar)
Pegamento
Tijeras
Emoticones e íconos impresos para que puedan pegar en el plano
Palabras disparadoras
Reproducciones de fotografías, por ejemplo, de luchas obreras y estudiantiles en distintos momentos, del movimiento de derechos humanos, del ex BIM durante la dictadura, de detenidxs-desaparecidxs vistxs en el lugar o de las Facultades de Humanidades y Psicología, entre otras posibles.
Dos biografías del libro Ramírez, Ana Julia y Merbilháa, Margarita (ed.) (2019). Memorias del BIM: Biografías. Las víctimas de la Fuerza de Tareas 5 en La Plata, Berisso y Ensenada. La Plata, Universidad Nacional de La Plata. Se entregarán dos diferentes a todos los grupos, la de un hombre y la de una mujer.
Las Jornadas se realizarán entre el miércoles y el viernes, en el mes de marzo[8], en el último día tendrá lugar la actividad virtual de cierre que recuperará, además, distintas cuestiones que formaron parte de la organización y el desarrollo de las Jornadas: un breve video del armado de las dinámicas, algunas fotos de las recorridas y de los grupos trabajando en sus cartografías y una galería de imágenes donde puedan apreciarse los mapas diseñados por los diferentes grupos. Asimismo, se preven momentos en los que algunxs estudiantes, guías y docentes puedan compartir brevemente sus impresiones en torno a toda la experiencia de la visita. No obstante, estas actividades virtuales no estarían totalmente definidas a priori sino que están sujetas a la cantidad de grupos participantes, a la recepción de la propuesta, a las producciones del mapeo, entre otros factores que incidirán en la organización del encuentro de clausura. Finalmente, la idea es que, con los mapas del ex BIM 3 terminados, pueda armarse una exhibición para que otras personas de la comunidad educativa puedan verlos.
Consideraciones finales
Indudablemente, este proyecto sólo constituye una de las maneras posibles de acercar a lxs estudiantes secundarios de la zona (y por extensión, a sus familias, compañerxs, amigxs y comunidades) a las memorias del BIM 3. Dado que se trata de un sitio de memoria en formación, crecimiento y transformación por su corta historia desde la expropiación del predio, y además, ya hay equipos de guías del ex BIM con distintas experiencias, se prevén múltiples instancias de intercambio y revisión, en otros términos, esta propuesta funciona como un guión conjetural y plataforma para pensar conjuntamente.
Bibliografía
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Benjamin, W. (1986). El narrador. En Sobre el programa de la filosofía futura y otros ensayos. Barcelona: Planeta–Agostini.
Berger, J. (1998). Usos de la fotografía. En Mirar. Buenos Aires: de la Flor.
Da Silva Catela, L. (2014). No habrá flores en la tumba del pasado. La experiencia de reconstrucción del mundo de los familiares de desaparecidos. La Plata: Al Margen.
Diker, G. (2004). Y el debate continúa. ¿Por qué hablar de transmisión? En Frigerio, G. y Diker, G. (comps.). La transmisión en las sociedades, las instituciones y los sujetos. Un concepto de la educación en acción. Buenos Aires: Novedades educativas.
Dujovne, M. y Calvo, S. (2002). El museo y la visita escolar. Imagen. Revista del Instituto de Historia del Arte Argentino y Latinoamericano, 93-109.
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Lafuente, A. y Horrillo, P. (2017). La Aventura de aprender: Cómo hacer un mapeo colectivo. Serie La Aventura de Aprender. Madrid: Gobierno de España, MECyD. Disponible en: http://laaventuradeaprender.intef.es/documents/10184/67475/Como-hacer-un-mapeo-colectivo (consulta: 16/11/2021).
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Raggio, S. (2017). Transmisión de la memoria: la experiencia en el encuentro con Otros. El largo proceso de institucionalización de la memoria en la escuela. Aletheia, 7(14).
Ramírez, A. J. y Merbilháa, M. (ed.) (2019). Memorias del BIM: Biografías. Las víctimas de la Fuerza de Tareas 5 en La Plata, Berisso y Ensenada. La Plata: UNLP.
Todorov, T. (2000). Los abusos de la memoria. Barcelona: Paidós.
Apéndice
HOJA DE RUTA TENTATIVA9
¡Hola a todxs! Ésta es la hoja de ruta que lxs acompañará en el recorrido. Aquí encontrarán dos planos del lugar, algunas “paradas imprescindibles” que podrán ubicar con la ayuda de las fotografías y una guía de preguntas disparadoras, para pensar, reflexionar, compartir y conversar entre ustedes.
No olviden que es un material que les pertenece, tomen apuntes, escriban, marquen, tachen, en fin… ¡intervénganlo como quieran!
PARADAS PROPUESTAS
Acá hay algunas “paradas imprescindibles” que podrán ubicar con la ayuda de las fotografías. Lxs invitamos a que comenten, marquen, formulen preguntas, agreguen o quiten paradas, tomen sus propias fotografías, guarden sonidos con sus celulares… ¡registren todo lo que deseen!
Guía de preguntas
Les dejamos una guía de preguntas que no es un cuestionario ni un formulario que deban responder, sino un conjunto de interrogantes para pensar y dialogar. ¡Hay espacio para agregar más preguntas!
¿Qué “huellas del pasado” fueron encontrando? ¿A qué temporalidades lxs condujeron?
¿Cómo imaginan este espacio hace 60 años, hace 40 y hace 30? ¿Cómo lo imaginan en 30 años?
¿Qué “paradas” les parecen más significativas? ¿Agregarían otras? ¿Cuáles?
¿Cuáles son las ideas y sensaciones que les gustaría inscribir en cada “parada”?
¿Qué les sugieren estas fotos? ¿Colocarían otras? ¿Cuáles?
¿Alguna parte del espacio les despierta algún recuerdo? ¿Cuál/es?
¿Cómo narrarían el sitio? ¿Qué elegirían contar?
No olviden tomar apuntes, dibujar y/o escribir lo que van pensando, charlando y sintiendo.
¡Manos a la obra!
Notas