Con traducciones al inglés, francés, portugués, entre otras lenguas, Pablo Stefanoni ha logrado reconocimiento a nivel mundial por su libro ¿La rebeldía se volvió de derecha? Este se ha convertido, dos años después de su publicación, en un trabajo de lectura obligatoria para los cientistas sociales —y para quienes se interesen en nuestro campo—. Nacido en la Argentina, Stefanoni es Doctor en Historia por la UBA. Su carrera profesional combina desde hace un tiempo la actividad académica con su oficio periodístico: Los inconformistas del Centenario. Intelectuales, socialismo y nación en una Bolivia en crisis (1925-1939) (La Paz, Plural, 2015) y Todo lo que necesitás saber sobre la Revolución Rusa (Buenos Aires, Paidós, 2017) se suman a una extensa lista de artículos de su autoría, relacionados con política latinoamericana e historia. Actualmente, forma parte del Centro de Documentación e Investigación de la Cultura de Izquierdas en la UNSAM, además de desempeñarse como jefe de redacción de la revista Nueva Sociedad.

La tapa del libro editado por Siglo XXI es atinada y atractiva. En ella, podemos ver las siglas LGTB —que históricamente han identificado al colectivo que cuestiona la heteronorma— representando algo nuevo: Liberty, Guns, Beer y Trump. El cambio de significado resume el objeto de análisis de la obra: la aparición de un nuevo fenómeno de derecha a nivel global y como este se adjudica la representación de la rebeldía. ¿La rebeldía se volvió de derecha?, a partir de un eficaz trabajo de investigación y una gran capacidad de análisis, estudia el fenómeno de las nuevas derechas del siglo XXI a nivel global, desde el gen de su aparición mediante sitios webs marginales hasta su consolidación representada por líderes políticos con discursos xenófobos, racistas y misóginos, pero que combinan miradas ecologistas y guiños a la comunidad LGTBIQ. El autor detecta como desde la anticorrección política y el antiprogresismo, este movimiento ha logrado captar la atención de miles de jóvenes y, mediante una lúcida mirada, produce una autocrítica desde la izquierda, realizándose las preguntas incómodas pero necesarias que cualquiera que se ubique en este espectro debería hacerse, para así comprender el fenómeno y tomarlo con la seriedad que merece.

El trabajo de Stefanoni está dividido en 5 capítulos, además de una introducción y un epílogo dedicados a la reflexión sobre estos nuevos acontecimientos. El recorrido planteado por el autor nada tiene de casual, sino que fue claramente pensado y bien ejecutado, dándonos un recorrido lineal acerca del surgimiento de estos nuevos movimientos y lo que representan.

En el primer capítulo, Stefanoni realiza una comparación entre el conservadurismo de Regan y Thatcher, referentes de la derecha a nivel global en las últimas décadas del siglo XX, y las nuevas derechas que han hecho aparición en la arena pública. Un factor de quiebre, marcado por el autor, fue la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales del 2016. A partir de allí, el campo de la derecha fue testigo de lo que podríamos considerar un recambio generacional de ideas entre los liberal-conservadores tradicionales, que abogaron siempre por un cosmopolitismo neoliberal, y este nuevo movimiento, caracterizado por un fuerte etnonacionalismo.

Remontándonos al título de la obra, en el segundo capítulo nos encontramos uno de los fundamentos por los cuales hoy la derecha se considera la rebeldía. A partir de teorías conspirativas y construcciones narrativas (fomentadas en su gran mayoría desde la web) el discurso de que la izquierda «ganó» la batalla cultural ha tenido impacto en las sociedades, principalmente en poblaciones jóvenes. La creencia de que hoy día vivimos en un régimen donde las famosas causas progresistas representan el statu quo —feminismos, aborto, matrimonio igualitario, educación sexual, entre otros— fundamenta el posicionamiento de estas nuevas derechas como la rebeldía que viene a combatir frente a la hegemonía de la corrección política. Es notable el trabajo de investigación realizado por Stefanoni en este capítulo, rastreando y leyendo acerca de sitios webs periféricos, que hicieron de base para estos discursos extremistas.

Por su parte, el tercer capítulo es quizás de lo más enriquecedor a nivel teórico. En el mismo, a partir de un recorrido histórico sobre distintas corrientes de pensamiento, Stefanoni intenta explicar cómo es que las ideas libertarias puedan hoy en día articularse con ideas reaccionarias, autoritarias y filofascistas. Desde la escuela austríaca hasta Milei, pasando por Rothbard (quien creó el término paleolibertario: libertarismo —no libertinaje— y valores autoritarios), el autor explica cómo hoy en día estos movimientos abarcan un populismo de derecha, apelando a las masas para lograr sus objetivos políticos.

El cuarto capítulo trae una temática poco abordada en el estudio de las nuevas derechas, pero no por ello menos interesante. Focalizando su análisis en las derechas de Europa occidental, el autor se pregunta si no hay una cierta conexión entre estos fenómenos políticos y las comunidades LGTBI. Algunas de estas agrupaciones de extrema derecha cuentan en sus filas con personas del colectivo mencionado y/o no tienen necesariamente discursos homófobos. Lo que Stefanoni ve muy perspicazmente es cómo se genera cierta vinculación entre discursos anti-migratorios y la defensa de los derechos de la comunidad LGTBI, considerando a estos últimos como un avance en el desarrollo de los valores occidentales que se encuentran en peligro frente a lo pregonado desde el islam

Por último, el quinto capítulo aborda la defensa del ambiente en los partidos y discursos de extrema derecha. Esta derecha ecológica que estudia Stefanoni, vincula los anhelos de una pureza racial junto con los de una pureza ambiental: de este modo, cuidar el ambiente es también cuidar las fronteras (Stefanoni, 2021). El autor aborda con gran precisión a lo largo del capítulo diversas aristas, como la historia de la síntesis entre naturalismo y nacionalismo que se dio en la Alemania del siglo XIX y XX y las diversas subculturas radicales, hoy presentes en la web, en defensa del ambiente. Considerando a la crisis climática como la base sobre la cual se construirá la política del siglo XXI, el investigador argentino se pregunta por las condiciones de posibilidad de una respuesta reaccionaria de parte de los partidos de extrema derecha en pos del cuidado del medioambiente.

El epílogo remonta alguna de las cuestiones planteadas en la introducción, pensando qué se puede hacer desde el progresismo para volver a levantar las banderas de la rebeldía y no ser meros espectadores de lo que está aconteciendo a nivel global. El autor plantea la necesidad de una renovación y actualización programática de la izquierda de manera urgente, frente a una extrema derecha que cada día tiene más adeptos.

La importancia de este libro radica en su capacidad explicativa de cómo este nuevo fenómeno logró instalarse en gran parte del mundo y los motivos por los que sucedió. Más allá de centrar gran parte de su trabajo en los Estados Unidos y en Europa occidental, la obra de Stefanoni nos ayuda a comprender de dónde vienen estas nuevas derechas que hoy están presentes en nuestra región. Este libro merece la pena ser leído por su original propuesta, su profundo análisis y por cómo invita a reflexionar al lector acerca del mundo en el que estamos insertos.