Anacrusa, comienzo y silencio. Blanchot y la voz (no humana) venida de otra parte
DOI:
https://doi.org/10.14409/tb.v1i8.7740Palabras clave:
Blanchot des Forêts, infante, silencioResumen
En los textos que dedica a Louis-René des Forêts, Maurice Blanchot profundiza sus análisis de la curiosa coexistencia de la voz, la muerte y el silencio que se da en la figura del infante. Allí ambos escritores se encuentran ante una voz que, viniendo de lo no humano (del espacio de ultratumba), es inasignable y resiste el pasaje a la significación que caracteriza al Hombre. En el recorrido que proponemos se hace manifiesta una voz que no se opone ni excluye al silencio, y un silencio que no deriva del callarse de la palabra. De tal manera, la diferencia inaudible entre naître (nacer) y n’être (no ser) adquiere el furor calmo de esos enigmáticos poemas de des Forêts, el poeta que sumido en el mutismo halló que para no escribir tendría que escribir sin fin hasta el fin (o a partir de él).